¿Qué quéeee??

Hello mis queridos, jueves ya, cómo vuelan las semanas! Espero que mi semana de vacaciones sí transcurra lento... jeje.

Pues qué les cuento, que anoche suena mi cell, un número de larga distancia, yo pensé que sería un cliente, pues tengo como clientes empresas del interior de la República, pero nel, lo que escucho "Erika, nena linda, ¿cómo estás? Habla A"... Repasé rápidamente mi memoria, afortunadamente su nombre es muy raro, de hecho no he conocido a alguien llamado así más que él, por lo que no me costó trabajo recordar: Es un chico con el que salí en varias ocasiones hace ya algunos meses, pero una cosa light, de pronto que la cenita, que la comidita, y nada más, no pasó a mayores. Nos hemos de haber visto unas 5 veces yo creo y luego ya, no me volvió a buscar y pues yo la neta es que tampoco, la vida transcurrió y el asunto pasó sin pena ni gloria.

Pues entonces imagínense ustedes anoche todo eso pasó por mi cabeza en un segundo, mientras le contestaba "qué ooooooonda, mi querido A, ¿cómo estás?", obviamente no le iba a hacer ningún pancho ni nada, de hecho me dio gusto escucharlo! ¿Qué habría sido de su vida? Pero el hombre empezó a decirme que me había extrañado mucho, que perdonara que se había alejado... y yo pensando: calm downnnnnn, no pasa nada, digo, si no éramos novios, le dije que neta me asaltaba la curiosidad, pero que para nada era reclamo. Me dijo que en ese momento fuera con él, que estaba en Cuernavaca. ¿Qué quéeeeeeee?? Obviamente lo mandé al carajo, le dije que no manche, cómo voy a salir en plena noche con todo e hija a Cuernavaca por un wey al que no veo hace meses??? Digo no sé, fuera una emergencia, o se tratara de una persona realmente significativa en mi vida, pero ni una ni la otra. Me dijo que lo que pasa es que quería platicar conmigo viéndome a los ojos, no por teléfono. Phone is as far as you can get right now, hon, le dije.

Y pues bueno, que me la suelta, me dijo que había regresado con su ex esposa, que porque no puede estar lejos de su hija, que ya no soporta a la vieja ésta (ayyy, ¿dónde he visto esta historia?), que incluso hubieron golpes hace unos días (insisto, ¿dónde he visto esta historia?), pero que me proponía algo, que él siguiera con su mujer y que yo fuera su amante!!!

Jaaaaa!!! La mismita cara puse yo, mis queridos, la mismita!!

Obvio, le dije que gracias, pero no gracias. ¿Debía sentirme yo halagada? Le dije que esas cosas de la infidelidad a mí no se me dan, que yo no formateo discos ajenos y que por otro lado no tengo problema en encontrarme alguien sin compromisos. Que tengo cerquita de mí una historia super parecida a la suya, que lo comprendo más de lo que él piensa, pero que yo sí vivo de manera congruente conmigo misma y que soy feliz porque elegí serlo.

En fin, me mandó muchos besos de despedida, me dijo que valgo mil, ya saaaaaben, todas esas cosas que se dicen, y yo me quedé más que indignada, sumamente divertida.