Merry Christmas!!!

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Y pos bueno, finalmente llegó la tan ansiada Navidad que nos metieron desde hace meses los centros comerciales...

Yo no entiendo, la verdad, ayer me volví a meter a un mall a ver si encontraba al mentado Santa Claus porque año tras año mi hija tiene su foto con el gordis, pero en esta ocasión lo habíamos estado buscando infructuosamente, la última vez fue en un Walmart, en donde se pone un Santa Claus en un stand de Kodak, entonces fuimos allá, pero decidimos primero entrar a la tienda y después a la salida tomar la foto. Todo hubiera estado perfecto de no ser porque al cabrón Santa se le ocurre salir a comer precisamente cuando salíamos ella y yo de la tienda. Demonios, se nos fue.

Entonces ayer que tuve tiempo en la tarde, ni tarda ni perezosa que me la llevo a Plaza Lindavista. Además, siendo sincera, quería ver qué otra cosa se me pegaba. Total, que desde que llegamos al estacionamiento vimos una colísima que llegaba hasta Montevideo y le daba la vuelta! ¿Qué demonios estaba pasando? Pues nada, que un tal Mariano Osorio, que resulta que es toda una celebridad, muy ñoño y fresa, estaba ahí dentro del Sears firmando autógrafos.

Bueno, pensé que no habría gran problema, al fin que seguramente dentro de la plaza habría un Santa. Pues sí, había, pero solamente uno que bailaba y hacía jueguitos y regalaba cosas. Pero NO uno para tomarse la foto. Solamente había otro y estaba precisamente dentro del Sears, y no solo eso, sino que juntito a donde estaba el Mariano Osorio!!

No, no, no, queridos compañeros bloggers, qué tortura. Súmenle a la gente normal de estas fechas, a una cantidad impresionante de fans ahí hechos bola! Como sea llegamos como triunfadoras con el Santa y el tipo de la cámara me dice "¿quiere una foto? Muy bien, ¿tiene su ticket?" Y yo "no, no tengo el ticket, pero dígame cuánto pago y ahora se lo traigo". "No, pues es gratis, pero en la compra de 250 pesos".... AAAARRRGGGHHHH!!!

Pues ahí nos tienen nuevamente inmersas en el monstruo del consumismo, yo pensaba que ya habiendo recorrido tanto trecho, no me iba a ir así nada más, ahora iba a tener la mentada foto a toda costa. Le compré un regalo más a mi novio (ya le había comprado otros dos), lo llevamos a la envolvedera (otra colísima) y llegamos nuevamente con Santa Claus.

No, pues ahora resultaba que la cámara se había descargado!! Y que por favor le diéramos unos quince minutos al camarógrafo para cargar. Yo estaba literalmente como leona, porque además no había comido! Pero bueno, finalmente cargaron la mentada cámara, nos tomaron la foto, la imprimieron y ahora la tengo cual trofeo -que de hecho lo es- ahí en el arbolito.

Lo que uno hace por los hijos!!

En fin queridos compañeros bloggers, muchos abrazos apretujaditos a todos ustedes -bueno, con las excepciones que conocen, jajaja-. Felices fiestas y a disfrutar!! Eeeee!!!